Dame fuerzas una vez más

HAZME FUERTE UNA VEZ MÁS

Jueces 16:28

La mayoría de nosotros ha leído o al menos escuchado sobre la vida de Sansón, lo que él hizo, cómo vivió y cómo terminó.

Sin embargo para aquellos que no saben mucho al respecto quiero brevemente darles un pequeño resumen:

Sansón nació bajo un voto de Nazareo, los nazareos eran personas apartadas que servían a Dios de una manera especial pues tenían prohibido cortarse el cabello símbolo de su dedicación, obediencia, fuerza espiritual y santidad; pero Sansón fue dominando y vencido por su débil humanidad al punto que gradual y lentamente empezó a faltar a sus votos como nazareo, empezó a faltar a su santidad, a su temor a Dios, a su obediencia, Y lentamente esto lo llevó a entrar en ciertas prácticas pecaminosas con las cuales perdió su fuerza, su unción, su liderazgo y por último su cabello símbolo de su propósito en Dios.

Sansón terminó en una oscura cárcel no solo física sino más aún espiritual, encadenado, ciego, y sin cabello. Y es precisamente qué estando él en esta terrible condición, clamo y oró a Dios para que «UNA VEZ MÁS» le diera esa fuerza espiritual y sobrenatural que tenía antes, y así poder vencer y ser libre de nuevo aún si esto implicaba sacrificar  su propia vida física.

Las enseñanzas que la vida de Sansón nos regala son muchas y muy necesarias para nuestras vidas hoy.

Muchos de nosotros al igual que Sansón hemos sido llamados y apartados por Dios para vivir y llevar una vida diferente a la de los demás, llamados a servir, llamados a ser santos, a ser obedientes y nazareos de corazón; pero de igual manera que Sansón se ha empezado gradual y lentamente a entrar en ciertas prácticas, palabras, conductas, miradas y obras pecaminosas que ha ido llevando a muchos  gradual y lentamente a alejarse de la unción, santidad y obediencia a las cosas de Dios.

El cabello espiritual ha venido cayendo uno a uno, y sin darnos cuenta nuestra salvación y vida espiritual cada vez se aleja más y más, y nuestras fuerzas de decir no al pecado y a lo que nos atrae cada vez son más pocas.

Tal vez algunos ya fueron vencidos por Dalila símbolo de los deseos carnales, y ahora están en una cárcel espiritual, ciegos y sin poder ver que su pecado es un engaño, sin libertad de orar, de congregarse y adorar a Dios cómo se debe.

Es precisamente en este momento donde debemos clamar a Dios y decirle como Sansón « fortaléceme, te ruego, solamente esta vez, oh Dios, para que de una  vez tome venganza...» en otra versión dice 

 "hazme fuerte nada más que esta vez, oh Dios, para que de un golpe me vengue...»

De un golpe o de una vez, son palabras que hablan de determinación, de estar tan cansados de las cosas malas y de la vida sin Dios qué se está llevando; al punto de querer de una vez por todas cortar y acabar con el pecado.

Dar un golpe de determinación y de una vez decir a ese hombre o mujer en seco no más con esta relación de adulterio y fornicación, no más con estas amistades, no más con estas prácticas que llevo, no más con lo que estoy sintiendo y diciendo, no mas, no mas etc.

¿Será duro? SI, ¿lloraremos y hasta gritaremos? si, ¿se sentirá dolor y la ausencia de eso con que estamos cortando? si, ¿Pastor hay otra forma? No; solo con su muerte física sansón logró ser libre espiritualmente, romanos 6: 2 dice Porque los que hemos muerto al pecado, ¿cómo viviremos aún en él? Y también dice  si por el espíritu hacéis morir las obras de la carne viviréis romanos 8:13.

Conclusión:

Si usted de alguna forma se ha identificado con este mensaje, mi consejo es que te arrodilles, ores a Dios y le digas que te dé una vez más esa fuerza espiritual para dar no más, dar un golpe y cortar con la situación que estás viviendo o llevando.

Pastor Juan David V.